Desde que asumí la dirección editorial de la Revista Canadiense de Estudios Latinoamericanos y del Caribe en 2004, intenté darle un mayor espacio al pluralismo idiomático canadiense (aumentando el uso del francés) e hispanoamericano (incluyendo material en castellano y portugués).
Pero más allá del contenido, quise también darle a esta publicación académica una forma más acorde con la América Latina actual. Esto significaba salirse de ciertos estereotipos y clichés folklóricos, para poner el acento en la creatividad y diversidad cultural que caracteriza al continente. Por eso, inicié la costumbre de reproducir en la tapa de cada número una obra artística realizada por un creador latinoamericano contemporáneo.
Les di prioridad a artistas de origen latinoamericano que residen en Canadá, ya que se trata de una buena manera de subrayar los vínculos entre el norte y el sur de América.
Quisiera ahora abrir una búsqueda de obras para ilustrar los dos números del año 2008. A través de este medio, lanzo entonces un llamado a creadores latinoamericanos que trabajen en Canadá, o a quienes conozcan a alguno de ellos, para que propongan obras gráficas (pinturas, dibujos, grabados, etc.) o imágenes (de esculturas, murales, etc.) para la tapa de la Revista Canadiense de Estudios Latinoamericanos y del Caribe.
Simplemente, deben dejar en este blog un comentario con los datos y el enlace (link) al sitio en que la obra se encuentra, o bien enviarme un archivo en formato jpg (mi dirección de e-mail se encuentra aquí). No se trata de un concurso formal, pero consultaremos con especialistas y también recabaremos la opinión de los lectores de este blog.
LAS TAPAS RECIENTES:
The picture on the cover shows an oil painting (El Extranjero, “The Foreigner”) by Mariana Semino. She has a background in theatre stage setting and worked at the Teatro Colón in Buenos Aires from 1993 to 1997. Semino left Argentina in 2002 and settled in Montreal. Her most recent oil paintings have been exhibited at Chapman University in California, Galerie d’Art St-Ambroise in Montreal, and Galería El Puente in Buenos Aires. This is how the artist explains her creative process: “As I start painting, persons, animals and objects are shaped on the fabric. Everything is mixed. If I’m lucky, a certain balance appears; if that doesn’t happen, and if I see it, I start all over again.”
The picture on the cover shows an oil painting (El Fuego, “Fire”) by Alejandro Boim. The artist was born in Argentina in 1964. He immigrated to Canada in 2002 and currently lives and works in a Montreal suburb. Boim is a graduate of the national School of Fine Arts of Buenos Aires and holds a licence in Visual Arts from the University of Paris. Winner of many prestigious prizes, his works have been exhibited around the globe. Boim received Argentina’s National Painting award in 1996 and 2000, and in 2001 he was awarded top prize at the Buenos Aires Drawing Contest.
The picture on the cover shows a collage (“Untitled”, 1990) by Norberto Majlis, an Argentinean-Brazilian-Canadian artist. He has had 11 solo exhibitions, and participated in many collective art exhibitions in Argentina, Brazil, Chile, Canada, France and Italy. He obtained the first prize for prints in the 29th Art Salon of the State of Pernambuco, Brazil, several awards in Italy, and an award in the Art Contest of the Pierrefonds Cultural Centre of Montreal. Majlis immigrated to Canada in 1996.
The picture on the cover shows a fragment of one of Sergio Otero Miranda’s ofrendas (altars to the dead). Otero Miranda’s work with calacas (handmade skeleton figurines) builds on a fascinating Mexican tradition. Religious and mythical symbols, everyday effects, and personal mementos are combined in a complex visual narrative. Emotion, humour, sorrow, and fright are part of the mix. The artist was recently in Canada to show his calacas and conduct workshops at the Canadian Museum of Civilization.
This issue's cover reproduces a piece from Helena Martin's Faites Trois Souhaits exhibition. Her work deals with the relationship between consumption and superstition. Helena Martin was born in Cartagena, Colombia. She now lives and works in Montreal.
jueves, 31 de enero de 2008
viernes, 25 de enero de 2008
Actividad con el Director de Relaciones Bilaterales de la Cancilleria de Bolivia
El Colectivo de Información sobre Bolivia, en colaboración con el Observatorio de las Américas de la UQAM organizó recientemente una actividad aprovechando la visita a Canadá de dos altos funcionarios del actual gobierno de Bolivia. Se trató de hacer un balance de los dos primeros años de la presidencia de Evo Morales. Como indicación del interés que esta cuestión suscita aquí, mencionemos que la publicidad se hizo solamente una semana antes del evento (fundamentalmente por e-mail) y se presentaron más de 70 personas, por lo que hubo que cambiar de sala.
El Director de Relaciones Bilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, Sr. Jean Paul Guevara (en la foto), hizo una breve exposición de los cambios socioeconómicos y políticos en Bolivia. Obviamente, su punto de vista es el de la defensa de la gestión del Presidente Morales. El debate con el público fue muy interesante y estimulante. Algunas preguntas incluyeron, por ejemplo, críticas relativas a los procedimientos democráticos del actual gobierno boliviano (con respecto a la Asamblea Constituyente) y cuestionamientos sobre los riesgos de ingresar en una espiral inflacionaria, un tema muy delicado en Bolivia. El Sr. Guevara dio prueba de un conocimiento muy profundo de las variables políticas y económicas de su país, así como de sus fuertes convicciones en lo que hace a la transformación que está llevando a cabo Evo Morales y su partido, el Movimiento al Socialismo.
El Director de Relaciones Bilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, Sr. Jean Paul Guevara (en la foto), hizo una breve exposición de los cambios socioeconómicos y políticos en Bolivia. Obviamente, su punto de vista es el de la defensa de la gestión del Presidente Morales. El debate con el público fue muy interesante y estimulante. Algunas preguntas incluyeron, por ejemplo, críticas relativas a los procedimientos democráticos del actual gobierno boliviano (con respecto a la Asamblea Constituyente) y cuestionamientos sobre los riesgos de ingresar en una espiral inflacionaria, un tema muy delicado en Bolivia. El Sr. Guevara dio prueba de un conocimiento muy profundo de las variables políticas y económicas de su país, así como de sus fuertes convicciones en lo que hace a la transformación que está llevando a cabo Evo Morales y su partido, el Movimiento al Socialismo.
lunes, 21 de enero de 2008
Siguiendo con las "latinidades comunes"
Aunque esté lejos de ser científico, el pequeño sondeo de opinión que figura en el margen derecho de este blog da un resultado interesante. Asumiendo que las 48 personas que participaron sean mayoritariamente de origen latinoamericano, vemos que la idea de una latinidad afín, aunque sea limitada, es claramente predominante (80%). Esto es, franco-quebequenses y latino-americanos compartirían un trasfondo cultural que los distingue, como comunidades, del mundo anglosajón. Obviamente, no hay que sacar demasiadas conclusiones de estas cifras. Sin embargo, ellas reflejan una impresión que yo tengo desde hace ya bastante tiempo y que muchos latino-quebequenses comparten.
Este trimestre estoy dictando un curso en la universidad sobre “Democracia, ciudadanía y pluralismo” (blog del curso: http://neoquebecois.blogspot.com). Voy a plantear la pregunta a mis más de 70 alumnos, en su mayoría franco-quebequenses. Veremos si hay una opinión similar…
Este trimestre estoy dictando un curso en la universidad sobre “Democracia, ciudadanía y pluralismo” (blog del curso: http://neoquebecois.blogspot.com). Voy a plantear la pregunta a mis más de 70 alumnos, en su mayoría franco-quebequenses. Veremos si hay una opinión similar…
jueves, 17 de enero de 2008
Reflexiones sobre latinidades comunes
Ayer (miércoles 16 de enero) estuve en Radio-Montréal (CIBL-FM) para hablar de la comunidad “latino-québécoise”. Comenté sobre la importancia creciente de esta comunidad y también sobre el aumento del uso del español en el Québec. Con el animador del programa, abordamos el tema de los prejucios y mitos. Por ejemplo, la idea de que todos los latino-americanos son “iguales” en lo que hace a su apariencia, costumbres, manera de hablar y de comer, etc. Y por supuesto, el estereotipo del “latino vago”, al que le gusta “la siesta y la fiesta”. Obviamente, existe una simpatía natural de muchos Québécois ante la actitud a veces más jovial y cálida de quienes vienen del sur del continente, pero en el momento de hablar “negocios” este rasgo puede ser percibido como parte de una “ética laboral” menos estricta que la norteamericana. El prejuicio contrario existe también: algunos inmigrantes de América Latina consideran a los Québécois (francófonos) menos trabajadores y menos eficientes, confundiendo – en mi opinión – un carácter menos disciplinado con una falta de “seriedad” o de “capacidad”. En el fondo, los “latinos” del norte y del sur nos atribuimos mutuamente los defectos de una cultura que no estaría al nivel de la nórdica anglosajona…
lunes, 14 de enero de 2008
Some tips on language etiquette in Montréal
Publiqué este breve texto en el boletín de la Asociación de Estudios Latinoamericanos (basada en Pittsburgh, USA) para darle a los aproximadamente 4,000 participantes del Congreso de Montreal 2007 (en su mayoría provenientes de EE.UU. y de América Latina) una idea sobre lo delicado del tema del idioma en Québec...
Some tips on language etiquette in Montréal
[published in LASA FORUM (The Latin American Studies Association Newsletter), SUMMER 2007 : VOLUME XXXVIII : ISSUE 3]
Language is an extremely sensitive issue in Québec. The strong “sovereignist” movement, which advocates the separation of Québec from Canada through democratic means, places the protection of the French language at the very top of its priorities. Many French-speaking people in Québec feel self-conscious and defensive about their language, particularly in relation to English-speaking North Americans. That’s why a few tips on language etiquette may come in handy when visiting Montréal.
Canada has two official languages at the federal level: English and French. However, except New Brunswick, each Canadian province has only one official language. French is Québec’s official language. About 80 percent of its population is “francophone” (French is their native tongue or the main language spoken at home). In Montréal, French-speakers represent almost 70 percent of the population (it’s the second largest French-speaking city in the world, after Paris). In the downtown area, most people in the service sector speak English (as a first or second or even third language). Nevertheless, outside places specifically catering to tourists and international visitors (e.g. hotels, conference halls, etc.), it is considered common courtesy to ask “Do you speak English?” when addressing someone in that language. Any effort made by a visitor to use some French during an interaction with French speakers––even if only a “Bonjour” or a “Merci”––is generally perceived as a friendly gesture and elicits an equally friendly response.
Québec is pronounced “keh-BECK” in French and “kuh-BECK” in English. The adjective in French is “Québécois,” pronounced “keh-beh-KWA” (the “s” is silent). In English, two forms are usual: “Quebecer” (more common) and “Quebecker.” However, many English-speaking citizens of Québec have adopted the French word “Québécois” in written and verbal communication and it is considered culturally sensitive to do so. In Spanish, the adjective is “Quebequense,” but many Spanish-speaking Quebecers also use “Québécois.” Some of them prefer the more familiar term “Quebeco” (but please note that, while this word is not intentionally derogatory, it might be interpreted as such by a French-speaking person).
The proper name of the city is Montréal, with an (acute) accent on the “e.” The word comes from “Mont Royal,” or “Royal Mount,” the big hill located in the middle of Montréal Island. When uttered in French, it sounds like “Monray-AL,” pronounced with a guttural “r” (although some older French-speaking Montrealers use the rolling “r”). Contrary to what some assume, the “t” is never silent when saying the city’s name in English or Spanish. In English, there are two ways of pronouncing it. English-speaking Montrealers tend to say “MUN-treal,” while most Americans say (incorrectly in the opinion of some Anglophone Montrealers) “MAWN-treal” or “MAHN-treal.”
The Québécois are known for their hospitality and warmth. They feel strongly about their own language and cultural heritage, but that should not be construed as an intolerant attitude towards outsiders. Actually, many of them love to discuss politics, and they will enthusiastically engage a conversation with a foreigner about Québec’s history and current affairs.
Some tips on language etiquette in Montréal
[published in LASA FORUM (The Latin American Studies Association Newsletter), SUMMER 2007 : VOLUME XXXVIII : ISSUE 3]
Language is an extremely sensitive issue in Québec. The strong “sovereignist” movement, which advocates the separation of Québec from Canada through democratic means, places the protection of the French language at the very top of its priorities. Many French-speaking people in Québec feel self-conscious and defensive about their language, particularly in relation to English-speaking North Americans. That’s why a few tips on language etiquette may come in handy when visiting Montréal.
Canada has two official languages at the federal level: English and French. However, except New Brunswick, each Canadian province has only one official language. French is Québec’s official language. About 80 percent of its population is “francophone” (French is their native tongue or the main language spoken at home). In Montréal, French-speakers represent almost 70 percent of the population (it’s the second largest French-speaking city in the world, after Paris). In the downtown area, most people in the service sector speak English (as a first or second or even third language). Nevertheless, outside places specifically catering to tourists and international visitors (e.g. hotels, conference halls, etc.), it is considered common courtesy to ask “Do you speak English?” when addressing someone in that language. Any effort made by a visitor to use some French during an interaction with French speakers––even if only a “Bonjour” or a “Merci”––is generally perceived as a friendly gesture and elicits an equally friendly response.
Québec is pronounced “keh-BECK” in French and “kuh-BECK” in English. The adjective in French is “Québécois,” pronounced “keh-beh-KWA” (the “s” is silent). In English, two forms are usual: “Quebecer” (more common) and “Quebecker.” However, many English-speaking citizens of Québec have adopted the French word “Québécois” in written and verbal communication and it is considered culturally sensitive to do so. In Spanish, the adjective is “Quebequense,” but many Spanish-speaking Quebecers also use “Québécois.” Some of them prefer the more familiar term “Quebeco” (but please note that, while this word is not intentionally derogatory, it might be interpreted as such by a French-speaking person).
The proper name of the city is Montréal, with an (acute) accent on the “e.” The word comes from “Mont Royal,” or “Royal Mount,” the big hill located in the middle of Montréal Island. When uttered in French, it sounds like “Monray-AL,” pronounced with a guttural “r” (although some older French-speaking Montrealers use the rolling “r”). Contrary to what some assume, the “t” is never silent when saying the city’s name in English or Spanish. In English, there are two ways of pronouncing it. English-speaking Montrealers tend to say “MUN-treal,” while most Americans say (incorrectly in the opinion of some Anglophone Montrealers) “MAWN-treal” or “MAHN-treal.”
The Québécois are known for their hospitality and warmth. They feel strongly about their own language and cultural heritage, but that should not be construed as an intolerant attitude towards outsiders. Actually, many of them love to discuss politics, and they will enthusiastically engage a conversation with a foreigner about Québec’s history and current affairs.
sábado, 12 de enero de 2008
Los hijos de inmigrantes son los mejores alumnos en la provincia
Un informe del Ministerio de Educación de Québec que analiza diez años de trayectoria escolar de más de cien mil alumnos que se inscribieron en el primer año del secundario en 1994-95 demuestra que los que tienen un mejor desempeño académico son los jóvenes nacidos en Canadá de padres inmigrantes o cuya lengua materna no es ni el francés ni el inglés (es decir que son “alófonos”). Son entonces los “inmigrantes de segunda generación” los de más alto rendimiento escolar en la provincia, dejando rezagados a los Québécois francófonos o anglófonos nacidos aquí. Tal fenómeno puede explicarse tal vez por el nivel de educación de los padres inmigrantes (muchos de los cuales fueron seleccionados mediante un sistema de puntaje que prioriza esa dimensión) y por el valor crucial que esas familias dan al rendimiento escolar, ya que este factor incide directamente en la integración a la sociedad. Es evidente que este argumento puede invertirse, al menos parcialmente, para indicar que la población nativa de Québec daría menos prioridad a la educación de sus hijos que la población inmigrante. Se trata de otro dato interesante que permite cuestionar la imagen del inmigrante “ignorante de los valores fundamentales de la sociedad quebequense”, “aprovechador” y “demandante” que lamentablemente se generalizó durante el debate en torno a los “acomodamientos razonables”. Los inmigrantes, en efecto, demuestran un buen nivel de adhesión a los parámetros culturales de esta sociedad y una clara integración a sus instituciones básicas, como lo es el sistema educativo. Irónicamente, uno de los grupos que manifiesta el mejor rendimiento académico es el de origen en Medio Oriente.
Ver Informe del Ministerio
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